Quince Reglas para Estimular el Lenguaje del Niño
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Hábleble al niño acerca de las actividades diarias: "Ahora iré al supermercado, ¿quieres acompañarme?.
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Jugar con ellos, juegos en que estén implicados los dedos y el tacto: "pulgarcito, pulgarcito ¿dónde estás? Aquí estoy, gusto en saludarte, gusto en saludarte ya me voy, yo también!!."
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Cantarle, leerle cuentos, memorizar pequeñas rimas, trabalenguas, adivinanzas y poesías. De esta forma amplía su vocabulario jugando a pensar y recordar sin ninguna presión.
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No imitar su lengua de trapo. Si dice " tero I a paya", contestar ¿Quieres ir a la playa?
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Gradualmente ampliar su forma de expresarse. A sus frases "vamo madonals" contestar " Vamos a ir a Mcdonalds y comeremos un delicioso helado"
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No corregirle ni ponerle en evidencia. Eso le desanima a expresarse.
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Evitar forzar el aprendizaje, pidiéndole que constantemente repita palabras largas o preguntándole sobre esto o aquello.
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No fingir no entenderle para obligarle a pronunciar bien, es más aconsejable retomar lo dicho pronunciando correctamente pero sin hacer énfasis en su error.
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Hay que evitar marearle todo el tiempo con nuestra conversación, necesitan también de pausas que les permitan pensar antes de contestar.
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Ser observador, pues no siempre están de humor para conversar, permitirle esas pequeñas pausas.
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No adivine sus pensamientos, ni haga obvias sus necesidades y deseos, permita que se exprese.
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Los juegos como : lotería, scrabble y otros de acuerdo a edad son una divertida y amena forma de ampliar y corregir nuestro lenguaje.
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Aproveche las oportunidades que se presenten para hacer comentarios acerca de lo que vió, qué le gustó etc.
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La sobremesa, como nos diría nuestra abuelita, es un buen momento para conversar amenamente.
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Sea expresivo y comuníquese con amor, recuerde que es el motor de todo aprendizaje.